Miles de trabajadores agrícolas del Valle todavía están trabajando arduamente, asegurando que las familias de todo el país tengan comida en sus mesas. Pero a algunos les preocupa que corran un mayor riesgo de contraer COVID-19, debido a que viven y trabajan en lugares cerrados.
La Senadora estatal Anna Caballero dice: "Existe el temor de que puedan contraer este virus en esas situaciones de hacinamiento, tanto en el alojamiento como en los desplazamientos al trabajo, y también algunos de los entornos laborales implican que trabajen hombro con hombro en algunas máquinas".